La Cámara de Representantes convirtió en ley el dictamen que unifica diferentes proyectos presentados por los diputados Carlos Rovira, Martín Sereno, Mario Vialey y por la ex legisladora Rossana Franco. A través de esta norma se creó el Sistema de Gestión Holística de Agua Pluvial, como método estratégico de planificación en el manejo eficiente de agua de lluvia con destino a usos múltiples, actividades agropecuarias y forestales, en áreas urbanas y rurales.

La finalidad es aumentar la resiliencia a los efectos adversos del cambio climático y reducir la vulnerabilidad para eventos futuros.

Con este sistema se busca establecer los lineamientos generales para la captación, tratamiento y uso del agua pluvial en zonas urbanas y rurales, fortaleciendo la participación de las comunidades locales en la mejora de la gestión del agua y la previsión de contingencias ambientales.

Además, promover el uso eficiente del agua pluvial y del suelo; generar una alternativa sustentable a través de la captación de aguas pluviales para el uso doméstico, comercial e industrial, en establecimientos educativos y obras públicas, en zonas urbanas y rurales; y disminuir el consumo de agua de red; entre otros.

En los fundamentos del proyecto, Rovira explicó que “el manejo eficiente de los recursos hídricos en los sectores agrícolas y forestales es fundamental para lograr la continuidad de la productividad y reducir la vulnerabilidad ante eventos futuros que la puedan afectar”.

“La gestión integral del riesgo ante la variabilidad de las precipitaciones requiere que los sistemas productivos, tanto los dependientes del agua de lluvia como los irrigados, sean flexibles y adaptables al cambio climático”, agregó.

Sereno, en tanto, manifestó: “La cosecha de agua tiene múltiples usos y mientras más se incentive y se concientice a la población sobre métodos de almacenamiento estaremos brindando mayor calidad de vida y preservando nuestro recurso para generaciones futuras”.

Por otra parte, Vialey se refirió a cómo mediante medidas adecuadas el agua que se elimina de la calzada puede servir para “favorecer la absorción por infiltración en beneficio de los terrenos aledaños a los caminos”.

Antes de la votación, la presidenta de la Comisión de Obras, diputada Laura Duarte informó que “es una ley integral que va a ir trabajando cada aspecto a través de las capacitaciones, de la formación, del aporte financiero y el acompañamiento. Las instituciones públicas también forman parte de esta ley, que promueve el uso eficiente del agua de lluvia. Pero además se evita en las zonas rurales la erosión del suelo, el escurrimiento de la tierra”.

“Esta Ley es fundamental porque facilita a que cada uno en los conglomerados habitacionales también podamos generar este acopio de agua que nos pueda servir para el uso doméstico, también para el sector sanitario, y los establecimientos educativos”, explicó.

Ramiro Sosa, ingeniero que participó de la elaboración de uno de los proyectos que conforman esta iniciativa detalló que se viene trabajando “hace varios años en todo lo que hace a la conservación de suelo y agua, tratando de buscar que el agua infiltre donde cae; y así volver a recargar nuestras napas a través del aprovechamiento de esta agua de lluvia, y eso es fundamental; por ello se trabaja con diferentes técnicas, y esta ley viene a apoyar y a incentivar todo el trabajo”.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente Economis