La noticia de que una niña murió por ingerir cocaína causa conmoción y aún se busca determinar quiénes fueron los responsables. Los investigadores allanaron la casa de los padres y no encontraron ningún elemento que los incrimine. Mientras la familia aún procesa la dolorosa perdida, trascendió un audio que la madre habría enviado a un grupo de la escuela de la niña.

Con el correr de las horas las autoridades han logrado algunos avances en el esclarecimiento del hecho y si bien aún no se sabe cómo la niña ingirió la cocaína, sí se supo que no fue víctima de abuso sexual como se había hipotetizado en un principio.

Ahora trascendió un audio que supuestamente la madre de la niña envió a un grupo de WhatsApp de la escuela de la pequeña.

Con la voz quebrada como de quien lleva llorando varias horas se la escucha acusar a la maestra de su hija y a sus compañeros de clases por un presunto bullying al que sometían a la niña.

Además en el mismo audio se la escucha pedir a los otros padres que “cuiden mucho a sus hijos” y afirmar que “nosotros no sabemos cómo ingirió esa cosa”. “A partir de ahora se los va a investigar a todos para saber de dónde salió eso”, enfatizó.

El audio es poco claro ya que la mujer habla con un elocuente dolor. Sin embargo, uno de los puntos que repite insistentemente es el maltrato que una maestra ejercía sobre la niña. “Cuando yo crié a mi hija, ella siempre me decía que la maestra no le daba pelota”, dijo.

Haga lo que quiera maestra, si quiere denunciarme, lo lamento pero en este dolor tan grande mi reacción es esta”, dice en el audio.

La palabra de la médica que atendió a la niña que murió por ingerir cocaína

La médica precisó que el pasado sábado, alrededor de las 11 de la mañana, ella se encontraba de guardia en el servicio de Emergencia, junto a otra profesional, cuando ingresó la niña derivada desde Garuhapé, zona de Salud que corresponde a Puerto Rico, con un cuadro que describió de la siguiente manera: “Con dolor abdominal y desorientación témporo-espacial bastante profundo, en estado comatoso”.

Siempre según lo que afirmó la médica, durante las primeras horas se mantuvo a la menor en el servicio de Emergencia, se le practicaron todos los estudios de rigor, principalmente para evaluar el estado de deshidratación y el estado de shock en el que se encontraba, “que no coincide con el diagnóstico con el que fue derivada ni con el relato que nos da el padre en ese momento, para una nena de 9 años. Como el cuadro neurológico daba para pensar en dos cosas: la presencia de un tumor o de una encefalitis, o la posibilidad de haber consumido de forma accidental o de alguna otra manera alguna benzodiazepina”.

Con esas dos posibilidades consideradas igualmente graves, dijo Piriz que aplicaron el protocolo establecido tanto para el caso que se tratara de algo neurológico y la parte de intoxicación. “En ese panel de drogas, se hizo el pedido para el análisis de control de benzodiapezina, porque puede ocurrir que un niño se tomó un diazepán de la abuela o algo así. En ese panel hay un amplio espectro de drogas, entre ellos, se pide un análisis con reactivo para cocaína y se ingresa a la niña a terapia para mejor control porque tenía toda la clínica para ese tóxico”.

Ya en terapia, la menor habría tenido “muy mala evolución, no pudiendo ‘lavar’ el tóxico que no sabemos en qué condiciones fue ingerido,”, situación que llevó al nosocomio a denunciar el caso y pedir la intervención de la Justicia porque según consideró la profesional “no deja de ser un tipo de abuso y también para descartar la sospecha de abuso sexual en la infancia; el médico forense descartó el abuso sexual y quedó el cuadro compatible con intoxicación con cocaína”.

“Dentro de las 48 horas, por el estado comatoso de la menor, como seguía con muy mal evolución, se decidió conectarla al respirador y finalmente falleció en horas de la madrugada de este lunes”, añadió la médica, quien subrayó que solo “hasta ahí” podría informar dado que todo lo demás está en manos de la Justicia.

En cuanto a la descripción más detallada del estado en el que arribó la menor al SAMIC, señaló que “estaba somnolienta, irritable; no tenía su estado de alerta y no se podía comunicar; sus pupilas no respondían y los estudios que se hicieron de inmediata se descartó cualquier cuestión neurológica”.

En la entrevista que brindó la médica a medio digital “Eldópolis”, afirmó que desconocen las circunstancias de la intoxicación, y que sobre el hecho fueron convocados a declarar los padres y los médicos que la atendieron en el SAMIC.

Según el relato de los padres, la menor se despertó con dolores abdominales, fue llevada al hospital de inmediato. Especialistas en toxicología habrían sido consultados y explicado que el tóxico podría haber sido ingerido 48 horas antes.

La niña y su familia son oriundos de Garuhapé e interviene el Juzgado de Puerto Rico.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente MOL