De acuerdo con los datos de la Confederación Argentina de la Pequeña y Mediana Empresa (CAME), del total de 4,2 millones de personas que se movilizaron, 1,9 millones fueron turistas que viajaron por la Argentina y gastaron $11.400 millones, y 2,3 millones fueron excursionistas que decidieron trasladarse a ciudades cercanas en busca de ocio, recreación, deportes o encuentros familiares, y gastaron $2666 millones.

El movimiento de Semana Santa se acercó a los niveles prepandemia, pero no logró mejorarlo. En 2019, la última Pascua que se pudo celebrar sin restricciones, se habían registrado 2,1 millones de turistas y 2,6 millones de excursionistas.

Según CAME, los turistas fueron “prudentes en sus gastos, eligieron destinos cercanos, menos populares, viajaron en familia o entre amigos de confianza y cumplieron los protocolos”. La estadía promedio fue de tres días y el gasto diario per cápita de $2000. En el caso de los excursionistas recorrieron entre el miércoles y el domingo más de 100 ciudades de la Argentina.

Para la entidad empresaria, excepto la situación sanitaria y económica, fueron muchos los factores que jugaron a favor del turismo de pascuas este año. Por un lado mencionó el buen tiempo, pero además que la fecha cayó sobre principio de mes cuando muchos ya cobran el sueldo; que los empresarios del sector mantuvieron prudentes y flexibles los precios y el temor a que se vuelvan a cerrar las ciudades frente a la segunda ola del covid y no se pueda viajar luego por varios meses.

Lo que el turismo podía esperar este fin de semana de Pascuas se había comenzado a ver en el fin de semana de Carnaval, cuando también muchos argentinos se movilizaron por el país, pero en aquel momento la cercanía del inicio de las clases presenciales no había permitido verlo en todo su esplendor.

semana santaTuristas y excursionistas de Semana Santa 2021

Con la amenaza de un nuevo cierre como protocolo para contener la segunda ola de contagios de coronavirus, la realidad este fin de semana fue mejor. Según el Ministerio de Turismo, hasta el miércoles 31 de marzo se habían realizado 1,2 millones de certificados para viajar en estos días, uno de los requisitos para poder transitar hacia los destinos.

De acuerdo con los datos de CAME, desde el domingo pasado ya se hacía difícil conseguir alojamientos. Los centros más elegidos fueron las localidades de la Costa argentina, Córdoba, Iguazú, Salta, Tucumán, Mendoza y Entre Ríos.

En este contexto, CAME denunció que al igual que en el verano “la coyuntura facilitó la oferta informal de servicios en desmedro de la formal”, lo que “ocasionó importantes perjuicios a los prestadores legales que soportaron las desventuras de casi un año sin turismo”.