Señalan que ya desde la pandemia venían “golpeados” por aumentos en los costos, tarifas desactualizadas y atrasos en subsidios. Este año se le agregó a los problemas la escasez de gasoil, las restricciones en las importaciones y la inflación.

El presidente de la Asociación Misionera de Empresarios de Transporte,Julio Horianski, brindó un panorama poco alentador de la situación actual de las compañías de colectivos urbanos y de corta y media distancia de la provincia y señaló que requieren de medidas para dejar de trabajar a pérdida.

El sector viene “golpeado” desde antes de la pandemia por el coronavirus, pero aclaró que con la emergencia sanitaria, que limitó el servicio al personal esencial durante casi todo el 2020, la crisis se profundizó.

Entre los inconvenientes, precisó que los costos internos aumentaron y como contracara hay atrasos en los subsidios y las tarifas quedaron desactualizadas. Sobre este último punto, indicó que si bien en el último tiempo existió una suba en los valores de los pasajes, señaló que esta actualización corresponde a la que se debería haber dado en el 2020. Es decir que hoy los boletos están al menos dos años atrasados.

Sin embargo, el empresario aclaró que, frente al contexto económico actual, “la solución no es aumentar las tarifas” sino lograr una compensación de Nación. En ese sentido, reveló que desde el 2012 prácticamente el Gobierno nacional dejó de subsidiar el transporte de corta y media distancia del interior del país y marcó que es necesario recuperar esos fondos en el próximo presupuesto

“Las empresas del interior al país vigentes al 2012 tienen un reconocimiento de Nación. Las que se crearon después o modificaron su recorrido no lo reciben”, detalló.

Inflación, gasoil e importaciones

 

A los ya inconvenientes existentes, el 2022 trajo en el sector de transporte otros dolores de cabeza. Horianski, gerente de la firma que lleva su apellido y que brinda servicios urbanos, de corta y media distancia en la Tierra Colorada, remarcó que en el primer semestre de esta año tuvieron que agregarle la inflación, la crisis en los combustibles y las restricciones en las importaciones.

Al respecto de las importaciones, afirmó que están con complicaciones para acceder a repuestos, carrocerías e insumos, como por ejemplo cubiertas, que no se fabrican en el país. Al ser consultado por la escasez de gasoil que azota al país, dijo que no están consiguiendo la cantidad necesaria que necesitan para seguir operando, aunque aclaró que esto aún no se ha traducido en la suspensión de servicio.

“Estamos pagando $240 o $260 el litro de gasoil”, declaró.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente Misionesonline